En cuanto la Camila tuvo conciencia para señalar hacia donde quería ir, su dedito siempre apuntó hacia el patio.
Sacarla a las 2 de la tarde está de locos, más para mi que para ella que al parecer no se inmuta con las variaciones de la temperatura, así que me espero como a las 6 P.M. para sacarla a que juegue un rato con el pasto, es decir, que lo jale hasta que le quede su manita llena de esta planta.
Pero su parte favorita es cuando nos toca regar, se vuelve lo quita con el agua y para no sentir que desperdicio tanta, muchas veces la baño ahí :$
Ver jugar a los niños con cosas tan sencillas me reconforta mucho, y quisiera hacer lo posible por que esta etapa tan linda durara lo máximo posible.