Las imágenes más famosas de la fotoperiodista Eve Arnold se balancean entre retratos de Marilyn Monroe y escenas del movimiento por los derechos civiles en Estados Unidos; esa polaridad temática me tiene bien encantada.
Es la primer mujer en pertenecer a la agencia Magnum, pero su interés en la fotografía comenzó cuando tenía casi 30 años, pensaba ser doctora pero afortunadamente a un novio se le ocurrió regalarle una cámara.
Con Marilyn Monroe logró una relación muy íntima, trabajaron juntas por años antes de que ambas fueran conocidas. En cambio su experiencia al lado de Malcom X no fue tan agradable al principio pero Eve reconocía la importancia y el valor de su registro fotográfico para el movimiento de los derechos de los negros.
Arnold era la que sostenía la cámara, pero Marilyn es quien sabía perfectamente como moverse y que hacer para que respondiera como ella quería, tomaba el control de la situación, a diferencia del set de filmación en el que pasaba horas ensayando sus líneas y siendo dirigida.
Durante 1960 siguió a Malcom X hasta dónde se lo permitió aunque los demás miembros de la Nación del Islam estuvieran en contra, durante algunos de sus eventos terminaba con la playera llena de orificios en su espalda ocasionados por quemaduras de cigarro.
Viajó por China, India, fotografió múltiples situaciones y personas, pero estas dos facetas de su trabajo me parecen tan contrarias pero tan buenas, que siento una gran admiración por no encasillarse e ir hasta dónde su instinto se lo gritara y en una época tan difícil para las mujeres.
Esta entrada pertenece a Blogtober y ahora recomendaré a otra bloguera de Hermosillo que decidió hacerlo en Instagram: Karla Rodriguez