Unas de las cosas mas deliciosas que puedo comer es el limón real con sal y chile; y ahora que estoy en San Francisco he descubierto otro vicio: las cerezas.

Aun que no son limones reales, encontré un tipo con un sabor muy parecido, el limón eureka, me lo atasco con pura salecita por que no he encontrado chile tipo tajín o similares. Al parecer los cítricos se producen durante una gran parte del año en California, quiere decir que no tendré que esperar cada invierno para experimentar tan ácido placer.

Sólo una vez había probado las cerezas naturales antes de visitar San Francisco, y me enamoraron. Así que ahora aprovecho cada ocasión para comprarme mi bolsita, sentarme, comérmela y escupir la semillita. No sé si tengan producción todo el año, pero mientras yo aprovecho.