El 14 de febrero se acercaba y aunque nunca lo he celebrado formalmente (porque todo está lleno y no me gusta engentarme) esta vez quería hacer algo con la Camila y sus amiguitos porque algo tienen los hijos y las fotos con niños disfrazados que te hacen sacar lo más cursi que hay en uno. Así que se me ocurrió hacer una sesión de fotos con el tema del amor para derramar mucha miel cada vez que las vea.
Aunque considero que soy buena haciendo manualidades, a la hora de armar un set completo se me seca el cerebro y no se bien como estructurar todo para que se vea armonioso, así que recurrí a la Tamara para que fuera la responsable de esta parte, zapatero, a tus zapatos.
Las fotos de niños me encantan por espontáneas, porque yo puedo comportarme de forma “tonta” justificando que es para que me hagan caras y reacciones divertidas, pero cuando se intenta tomar una foto de grupo con 5 niños que van entre 1 año a los 7, todo se vuelve un caos, pero un caos bonito, lleno de momentos super chistosos.
De verdad recomiendo tomarles fotos a los niños todos disfrazados, con decoración y accesorios variados aunque sea con el celular, en un futuro esas imágenes nos sacarán sonrisas y llenaran de recuerdos.
Si quieren ver más de estas bellas sesiones, pueden ir al álbum en mi página de fotografía 🙂