Hermosillo, siempre con gente dispuesta a tomarse una cheve, trabaje o no al siguiente día. Dónde hacerlo es la variante entre todos los que optan por tomarse unas platicadoras (o unas de peda) y no es que tengamos muchos lugares pero tampoco estamos tan escasos de opciones.
Si generalizamos de un tiempo para acá, podemos encontrar que bares y antros hay, pero no con mucha diferencia entre estos, si, los lugares cambian, unos mas grandes, otros de colores, mas ó menos caros, pero para quien busca música en vivo es casi la misma gata, alguna banda local que toca rock en español, ingles y pop, nuevas y viejitas.
Cuando recién abrió La negra, amplió las opciones para disfrutar de una cena o una cerveza, tenían miércoles de blues o jazz, no lo recuerdo con exactitud, comida africana. Después abrió un espacio para que un grupo de chavas tocaran, Blash y pegó.
Por razones para mi desconocidas dejaron de hacerlo, hasta hace poco, que además de su ya clásico grupo de fin de semana Big Bang, los jueves tienen otra banda de puras féminas que por su apariencia, son de edad recién legal pero que prenden con su repertorio variado y aún no quemado, ellas son: Dolly in.
El Gatopollo, bien rockero, con sus comidas con nombre de grupos, billar (ahora con sus precios mas bajos) y con grupo los fines de semana también decidió darle espacio la las mujeres los jueves con Blash y los miércoles al jazz con Berta´s Ballet Jazz Band, lo que me da un gusto enorme y no es que sea fanática de este género pero me gusta la variedad.
Asistí el primer miércoles de jazz y me agradó bastante, unas cervezas, papas con queso y plática. Lo repetiría.