En semana santa visitamos algunos pueblos cercanos a Hermosillo: Ures, Mazocahui, Babiácora y Aconchi.
Todos los recorridos fueron muy rápidas pero conocimos las plazas principales, sus iglesias y calles.
La experiencia más extraña del viaje fue en un lugar que ni siquiera se encuentra en el mapa, justo cuando íbamos pasando por “El Molinote” iba a empezar la celebración de semana santa, donde los hombres vestidos de lo que sea que pase por tu cabeza (para ellos esos eran los fariseos) azotan a los otros hombres que no están vestidos.
Nos comentaron que a día siguiente los papeles se invierten y ahora los no disfrazados les pegarían a los “fariseos”, pero a ese evento ya no regresamos.
Esta pasada rápida me dejó con ganas de recorrer más.